mujer despechada mata a la amante de su novio cortando las cuerdas del paracaidas
LOS TRES HICIERON JUNTOS EL FATIDICO SALTO
En muchas ocasiones la realidad supera a la ficción. Esta historia es una de ellas, y podría tener un titular más o menos así: Tras enterarse de que su novio mantenía una aventura con una compañera del club de paracaidismo, una joven despechada corta las cuerdas de los paracaídas de la amante, que se precipita sin freno desde 4.000 metros de altitud mientras la caída era filmada. El suceso ocurrió en Bélgica, donde lo que parecía un desgraciado accidente se apunta como un crimen pasional en toda regla.
El pasado noviembre, Els Van Doren, de 37 años, moría al desplomarse después de fracasar en el intento de abrir los paracaídas principal y de emergencia. Madre de dos hijos, practicaba su actividad favorita durante una jornada en la que también participaban su presunto amante, un joven holandés identificado como «Marcel», y la novia de éste, Els Clootemans, 22.
El trío amoroso viajaba en el mismo avión desde el que Van Doren realizó su último salto. Pocos segundos después, la desgraciada paracaidista se estrellaba contra el suelo a 209 kilómetros por hora. Un testigo presencial reconoció ver «un punto negro caer» en las inmediaciones de la localidad de Opglabbek, en el centro de Bélgica, y descubrió finalmente que se trataba de una persona. El sufrimiento de Van Doren ha quedado registrado en un video que la Policía belga mantiene en su poder, y en el que se la ve filmarse a sí misma mientras intenta abrir desesperadamente su paracaídas.
Desde el primer momento, la incapacidad para accionar alguno de los dos paracaídas extrañó tanto a la familia de Van Doren, que destacó su enorme experiencia en el aire, como a los trabajadores del aeródromo desde el que despego la avioneta, que declararon que la posibilidad de que hubieran fallado los dos al mismo tiempo era «casi nula».
El suceso, que en su momento ocupó una escueta columna de algunos diarios belgas, ha pasado a la primera página después de que la joven Clootemans haya sido declarada «principal sospechosa» de lo que ya nadie considera un accidente. El fiscal del caso afirma que «puede ser un crimen pasional» al comprobar que «el paracaídas principal se encontraba atado, mientras que en el de reserva se habían cortado las cuerdas».
Asi que ya sabe, si va a poner los cuernos a su pareja... no practique deportes de riesgo.
En muchas ocasiones la realidad supera a la ficción. Esta historia es una de ellas, y podría tener un titular más o menos así: Tras enterarse de que su novio mantenía una aventura con una compañera del club de paracaidismo, una joven despechada corta las cuerdas de los paracaídas de la amante, que se precipita sin freno desde 4.000 metros de altitud mientras la caída era filmada. El suceso ocurrió en Bélgica, donde lo que parecía un desgraciado accidente se apunta como un crimen pasional en toda regla.
El pasado noviembre, Els Van Doren, de 37 años, moría al desplomarse después de fracasar en el intento de abrir los paracaídas principal y de emergencia. Madre de dos hijos, practicaba su actividad favorita durante una jornada en la que también participaban su presunto amante, un joven holandés identificado como «Marcel», y la novia de éste, Els Clootemans, 22.
El trío amoroso viajaba en el mismo avión desde el que Van Doren realizó su último salto. Pocos segundos después, la desgraciada paracaidista se estrellaba contra el suelo a 209 kilómetros por hora. Un testigo presencial reconoció ver «un punto negro caer» en las inmediaciones de la localidad de Opglabbek, en el centro de Bélgica, y descubrió finalmente que se trataba de una persona. El sufrimiento de Van Doren ha quedado registrado en un video que la Policía belga mantiene en su poder, y en el que se la ve filmarse a sí misma mientras intenta abrir desesperadamente su paracaídas.
Desde el primer momento, la incapacidad para accionar alguno de los dos paracaídas extrañó tanto a la familia de Van Doren, que destacó su enorme experiencia en el aire, como a los trabajadores del aeródromo desde el que despego la avioneta, que declararon que la posibilidad de que hubieran fallado los dos al mismo tiempo era «casi nula».
El suceso, que en su momento ocupó una escueta columna de algunos diarios belgas, ha pasado a la primera página después de que la joven Clootemans haya sido declarada «principal sospechosa» de lo que ya nadie considera un accidente. El fiscal del caso afirma que «puede ser un crimen pasional» al comprobar que «el paracaídas principal se encontraba atado, mientras que en el de reserva se habían cortado las cuerdas».
Asi que ya sabe, si va a poner los cuernos a su pareja... no practique deportes de riesgo.
el amor nos lleva por muy malos derroteros .. crueladevilla
